El papa Francisco ha regresado al Vaticano después de más de un mes de tratamiento en el hospital Gemelli debido a una neumonía bilateral. A su llegada, agradeció a sus fieles quienes se concentraron fuera del hospital, aunque se le notó débil y con el uso de una cánula de oxígeno. El pontífice, que continuó con su oración dominical del Ángelus, expresó su preocupación por los recientes bombardeos israelíes en Gaza, pidiendo su cese inmediato. A pesar de haber recibido el alta, se espera que el papa necesite al menos dos meses de rehabilitación para recuperar plenamente su salud y su capacidad vocal.