Las nuevas tarifas impuestas por la Administración Trump han generado tensiones con varios de sus principales aliados comerciales. En respuesta a estas acciones, Canadá ha impuesto aranceles de represalia, mientras que la Unión Europea está preparando una contestación robusta que busca proteger sus intereses comerciales. Este episodio marca un agravamiento significativo de la guerra comercial que podría tener repercusiones amplias a nivel internacional.