En un esfuerzo por combatir el contrabando de combustible, la Guardia Nacional, junto con la Fiscalía General y Petróleos Mexicanos, llevó a cabo un operativo en los puentes internacionales de Reynosa y Matamoros. Este operativo provocó paradas prolongadas en el tráfico, mientras las autoridades revisaban la documentación de los tráileres que intentaban cruzar, asegurando que no se estuviera utilizando carne o productos legales para encubrir el contrabando de combustible. Esta acción se deriva de un reciente y considerable decomiso de diésel.