Tras el anuncio de Ucrania acerca de la captura de dos soldados chinos, China el 9 de abril rechazó las acusaciones de que sus ciudadanos estarían siendo reclutados para el ejército ruso. Beijing calificó estas alegaciones como “infundadas” y afirmó que se están llevando a cabo investigaciones correspondientes. Las autoridades ucranianas afirmaron que Rusia utilizan las redes sociales para atraer a ciudadanos chinos, un hecho que ha desatado una ola de negaciones por parte de Beijing.