En Colombia, cerca de 100 mujeres han obtenido su libertad bajo una nueva ley que busca descomprimir las cárceles para madres solteras que han sido sentenciadas por delitos menores de tráfico de drogas, típicamente cometidos en contextos de pobreza y violencia. Esta legislación forma parte de una estrategia del gobierno para cambiar el enfoque de la “guerra contra las drogas” hacia un modelo más restaurativo y humanitario.