Este domingo, México enfrentará una inédita elección judicial por primera vez en que los ciudadanos elegirán a jueces y magistrados. A pesar del interés, la oposición ha criticado el proceso, amenazando con un boicot. La nueva metodología fue propuesta por el anterior presidente Andrés Manuel López Obrador para democratizar el poder judicial. Sin embargo, ha suscitado preocupaciones sobre la influencia de poderes externos. Durante la jornada electoral, unas 375 observadores de diferentes naciones monitorearán el proceso, que desafía las expectativas de alta participación debido al desinterés por los candidatos desconocidos.