Después de casi 48 horas de un completo apagón, la población cubana comenzó a recuperar gradualmente el servicio eléctrico. La experiencia de la falta de energía ha sido calificada de extraordinaria por los residentes, que esperan con ansias la restauración total de sus rutinas. Las autoridades han comunicado que se proyecta que el servicio vuelva a la normalidad pronto, marcando un alivio para la ciudadanía, que ha enfrentado desafíos significativos en los últimos tiempos.