Esta semana, miles de personas toman las calles en diversas ciudades de América Latina para conmemorar el Día del Orgullo LGBTIQ+. Sin embargo, el ambiente festivo contrasta profundamente con un aumento en los índices de violencia contra las personas que pertenecen a la comunidad LGBTIQ+. Activistas y organizaciones no gubernamentales han expresado su preocupación por la seguridad de los individuos de diversas orientaciones sexuales e identidades de género. A pesar de los avances legales, el temor y las violencias persisten, llevando a muchos a cuestionar la verdadera protección de sus derechos.